Fantástico helado de galleta caramelizada

Al primer sitio que fui cuando me marqué la escapadita veraniega, fue por supuesto a Córdoba!!! Entre unas cosas y otras hacía tiempo que no iba, así que no me lo pensé. Me encantó estar con mi yaya (la mami de mi padre) pasamos un ratito genial y se quedó alucinada de lo grande que está ya su bisnieta. Nos reímos un montón con ella, tiene cada cosa... vamos, no me importaría llegar a su edad y estar como ella, tan vital y con tantas ganas de vivir y disfrutar. Le hablé del blog y le conté todo lo que hacía y que me encantaba compartir con todas vosotras, la familia tan genial que tengo, y ella tan orgullosa, jeje. Además me encanta ir a su casa, son todos recuerdos bonitos, ya que yo viví durante mis primeros años de mi vida en el piso de arriba. Me encanta enseñarle a Yaiza, donde yo jugaba, donde di mis primeros pasos y hasta el que fue mi cole...
 

Cuando salimos de allí, nos fuimos a comer con mis tíos y con mi primo Pedro (responsable de la receta de hoy) un futuro policía nacional y un manitas total con la repostería (cuando lea esto, le da algo, jeje). Además de todo esto, es un niño fantástico. Por un rato nos olvidamos de todos y nos pusimos a hablar de recetas y del blog... Me dio a probar varias cosillas que no os puedo decir porque ya os las enseñaré, pero de la que si puedo hablar y de hecho lo voy a hacer, es la de hoy, con una pequeña modificación respecto a las galletas, oreo por galletas caramelizadas.

La receta no puede ser más sencilla, eso si, no apta para aquellas que empiezan la dieta (como yo) porque no entran los vaqueros del invierno pasado (pero sorry, no me pude resistir).

Ingredientes:

• 400 ml de nata para montar (más de 35% de materia grasa)
• 400 ml de leche condensada
• 150 g de galletas caramelizadas (yo las compré en Carrefour, marca Lotus)

Elaboración:

Con ayuda de unas varillas eléctricas montamos la nata, recordar que tiene que estar muy fría. Yo meto también el recipiente que voy a utilizar un ratito en la nevera.

Cuando esté montada, añadimos la leche condensada y mezclamos con movimientos envolventes y con cuidado para no bajar la nata.

Seguidamente, echamos las galletas previamente picadas en trocitos. Yo las metí en una bolsita para congelar y las golpeo con ayuda de un rodillo. No hace falta, que estén totalmente molidas, está genial con algún trocito más grande.

Para terminar, si tenemos heladera, pues heladera, y si no, echamos la mezcla en un recipiente apto para el congelador e introducimos en el durante 1 hora. Después sacamos del congelador, batimos y volvemos a meterlo en el congelador varias horas, así evitamos la cristalización.

Fácil, ¿verdad? pues venga a animarse toca, nos vemos el viernes que viene, con algo muy rico y siempre fácil. Chao amores.

Bueno, ¿qué os ha parecido mi total cambio de look? Esta es la entrada de estreno y todo esto se lo debo a Celia de El Perro de Papel y la verdad es que no puedo estar más contenta con el resultado, además ella es fantástica, como profesional y como persona. Desde luego me considero una persona afortunada, estoy rodeada de personas que merece mucho la pena conocer... Desde aquí, mil gracias por todo, muack!