Seguro que conocíais esta tarta, yo la había visto varías veces, y debo reconocer que me llamaba mucho la atención, pero nunca me ponía "manos a la masa". Me preguntaba como sería el sabor que deja esta cerveza negra en un bizcocho, y la verdad, me ha sorprendido.
Os animo a probarla, eso si, tengo que decir que tanto a mis padres, como a mi, nos gustó mucho, en cambio a mi marido, nada de nada. Menudo crítico tengo!!! En fin, hay que probarla para decidir, no?
Ingredientes:
-250ml de cerveza Guinness (es justo un botellín)
-75gr de cacao en polvo
-250gr de mantequilla sin sal
-400gr de azúcar blanco
-250gr de harina de trigo
-1 cucharadita de extracto de vainilla
-2 y 1/2 cucharadita de bicarbonato
-140ml de nata liquida
-2 huevos
Frosting o cobertura:
-250gr de queso tipo Philadelphia
-150gr de azúcar glass
-360ml de nata liquida 35% de materia grasa, ya que va a ser para montar
(Con estas cantidades, sale mucho frosting para mi gusto, podéis reducirlas, por ejemplo quitar 50gr de todo)
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º
Ponemos en un cazo al fuego, la cerveza y cuando esta esté caliente le añadimos la mantequilla, hasta que esta se disuelva completamente. Apartamos del fuego y reservamos.
En un bol seco, ponemos todos los ingredientes secos, echamos la harina, el bicarbonato, el cacao
En otro bol, echamos la nata, los huevos, el extracto de vainilla y la cerveza, que deberá estar ya fría, removemos bien con unas varillas manuales.
Esta cremita se la añadimos a la mezcla de harina y demás. Mezclaremos hasta obtener una mezcla homogénea.
Engrasamos y enharinamos el molde y vertemos la mezcla. Introducimos en el horno, en la receta original, te dice que 50 minutos, esto siempre depende del horno, en mi caso necesité 60 minutos, transcurrido ese tiempo mi palillo o tester cake salió limpio.
Sacamos del horno, y dejamos enfriar completamente.
Para el frosting, en un bol, limpio y seco, añadimos el queso de untar y el azúcar glass hasta formar una suave cremita.
Aparte, en otro recipiente debemos montar la nata. Para ello, la nata debe estar muy fría. lo ideal es que el recipiente también este muy frío, yo lo meto en la nevera un ratito antes y uso uno de metal. La montaremos con ayuda de unas varillas eléctricas, a mano tardaríamos mucho y no quedaría igual. Cuando esté, se la añadimos a la anterior crema, de poco a poco y con movimientos envolventes, ya que no queremos que se nos baje el aire de la nata. Lo mejor es hacer este proceso con una paleta o espátula.
Con nuestro bizcocho frío, untamos el frostig por encima, no hace falta que os esmeréis mucho, ya que como queda chulo es que "chorree" un poco por los lados. Si la hacéis de un día para otro, mejor, está más rica!!!
Importante:
-No sabe a cerveza, su sabor es como de trufa intensa
-No lleva alcohol, porque en la cocción del principio se evaporó
-Como ya os he comentado al principio, para mi gusto con estas medidas hacemos mucho frosting. A mi me ha venido bien, porque con lo que me a sobrado he hecho varias cosas más, que ya las iré subiendo.
Probadla y ya me contareis.
Besos.
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